Desde el trampolín hasta la cima, Gabriela Agúndez y Alejandra Estudillo mantienen la mirada fija en la gloria. En un nuevo episodio de excelencia deportiva, las clavadistas mexicanas volvieron a dejar huella, esta vez en la Copa del Mundo de Clavados de Windsor 2025, al colgarse la medalla de plata en la exigente prueba de plataforma sincronizada de 10 metros.
Con elegancia, precisión y una sincronía que hipnotizó a la audiencia, la dupla tricolor sumó 291.90 puntos, resultado de ejecuciones sólidas que demostraron su madurez competitiva. El desempeño fue un reflejo casi exacto del mostrado hace apenas una semana en el Mundial de Guadalajara, donde también se adueñaron del segundo lugar.
En lo más alto del podio repitió el dúo chino integrado por Wei Lu y Minjie Zhang, que impuso su dominio con una puntuación de 327.36 unidades. Las asiáticas ratificaron su supremacía internacional, sin dejar margen de error desde el primer clavado hasta el último.
Sin embargo, fue la constancia de Agúndez y Estudillo la que mantuvo encendida la emoción durante toda la competencia. Su actuación superó con claridad a las británicas Lois Toulson y Maisie Bond, quienes finalizaron en la tercera posición con 275.16 puntos. Más abajo en la tabla, los equipos de Estados Unidos y Canadá no lograron meterse al podio, concluyendo en el cuarto y quinto sitio, respectivamente.
El mérito de las mexicanas no solo reside en el metal obtenido, sino en la regularidad con la que han venido rindiendo en lo más alto del circuito. Dos podios internacionales consecutivos, ante rivales de primer nivel, confirman el momento estelar por el que atraviesa esta pareja de clavadistas.
La mente ya está puesta en la siguiente parada del calendario: la Súper Final de Clavados que se celebrará en China a partir del 2 de mayo. Un evento que reúne a las mejores del mundo y que representa el cierre perfecto para una temporada que ya ha dejado grandes momentos para el deporte mexicano.
Gabriela Agúndez y Alejandra Estudillo siguen escribiendo una historia que no deja de sumar capítulos de orgullo nacional. Con técnica, temple y trabajo en equipo, su vuelo no conoce límites.