El quarterback Deshaun Watson vuelve a estar en el ojo del huracán. El jugador de los Cleveland Browns enfrenta una nueva demanda por agresión sexual, lesiones e infligir intencionalmente angustia emocional, sumándose a las 25 acusaciones previas que Watson recibió en 2021 cuando jugaba para los Houston Texans. La nueva demanda, interpuesta en Houston, Texans, revive las polémicas que lo persiguen desde hace años.
Bajo el seudónimo de Jane Doe, la demandante afirma que el incidente ocurrió el 10 de octubre de 2020 en su propia casa. Según la denuncia, Watson apareció desnudo en la cama de la víctima mientras ella se encontraba en el baño, y luego la forzó a darle un masaje en los glúteos, tocándola sin su consentimiento y agrediéndola sexualmente. “Jane Doe salió de su baño y, sorprendentemente, lo encontró completamente desnudo en su cama, boca abajo”, se detalla en la demanda divulgada por NBC.
La representación legal de la víctima está a cargo de Tony Buzbee, el mismo abogado que lideró las demandas de las 24 mujeres que acusaron a Watson anteriormente. Buzbee no ha dudado en continuar su lucha para que Watson enfrente las consecuencias de sus acciones. «Es hora de que se haga justicia, ninguna cantidad de dinero puede borrar el daño que ha hecho», declaró Buzbee sobre el caso.
En 2021, Watson fue suspendido por la NFL durante 11 partidos, multado con cinco millones de dólares y obligado a someterse a una evaluación de comportamiento antes de ser reinstalado. Sin embargo, los Browns decidieron apostar por él y le ofrecieron un contrato multimillonario de cinco años y 230 millones de dólares garantizados.
La actual temporada no ha empezado bien para el QB de 28 años, quien el pasado domingo lanzó para 169 yardas, una anotación y dos intercepciones en la derrota de los Browns ante los Cowboys. A pesar de su talento en el campo, su reputación sigue empañada por las acusaciones que ponen en duda su futuro en la NFL.