El juicio contra ocho trabajadores de la salud por la muerte de Diego Armando Maradona continúa con fuertes declaraciones sobre las condiciones en las que vivió sus últimos días. El abogado Fernando Burlando, representante de las hijas del astro argentino, calificó la vivienda donde pasó sus últimos momentos como “una pocilga, una mugre pocas veces vista”.
En la segunda audiencia, realizada en el Tribunal en lo Criminal N°3 de San Isidro, Burlando presentó una maqueta para ilustrar el estado del lugar, argumentando que era “inapropiado para una internación domiciliaria”. Según el abogado, el baño tenía menos de un metro y no era accesible para la movilidad de Maradona. También afirmó que la disposición de la casa hacía imposible que los enfermeros escucharan cualquier queja del paciente desde donde dormían.
El juicio busca determinar si siete de los ocho acusados son culpables del delito de homicidio simple con dolo eventual. Los imputados incluyen al neurocirujano Leopoldo Luque, la psiquiatra Agustina Cosachov, el psicoanalista Carlos Díaz, la doctora Nancy Forlini, el médico Pedro Di Spagna, el coordinador de enfermeros Mariano Perroni y el enfermero Ricardo Almirón.
El tribunal también resolvió apartar a los abogados Rodolfo Baqué y Martín Miguel De Vargas de la defensa de Almirón debido a declaraciones previas de Baqué que apuntaban a que Maradona fue asesinado. La apelación del abogado fue rechazada de inmediato y anunció que recurrirá la decisión.
El proceso continuará el próximo martes con la declaración de los primeros oficiales que ingresaron a la vivienda el día de la muerte de Maradona. Se espera que el juicio se extienda hasta julio, con la participación de al menos cien testigos.