Explosivo, preciso y con una energía desbordante, así lució Jaime Jáquez Jr. en el partido donde registró la mejor actuación ofensiva de su carrera. El jugador mexicano de los Miami Heat anotó 41 puntos ante los Washington Wizards y dejó claro que está listo para protagonizar momentos grandes en la duela.
Jáquez firmó un desempeño que quedará marcado en su historia personal: encestó 17 de 25 tiros de campo, incluyendo dos triples en seis intentos. A eso se suman 10 rebotes y siete asistencias, cifras que lo colocaron muy cerca de un triple doble, elevando el listón de su rendimiento individual en la NBA.
Durante la campaña pasada, su mejor registro había sido de 20 puntos, y su tope histórico era de 31 unidades. Esta vez, el alero californiano de raíces mexicanas rompió barreras con una actuación sólida y constante de principio a fin. Ni la presión del marcador ni la falta de titulares detuvieron su intensidad en el juego.
Aunque el esfuerzo de Jáquez encendió a los fanáticos, el resultado colectivo no acompañó la hazaña. Miami Heat cayó por la mínima, 118-119, en un cierre dramático tras una canasta agónica de Bub Carrington, que selló la victoria para los Wizards en los últimos segundos.
El Heat, que ya tenía asegurado su lugar en el Play-In, decidió no arriesgar a jugadores clave como Bam Adebayo, Tyler Herro y Andrew Wiggins. El cuerpo técnico optó por rotar la plantilla de cara al crucial enfrentamiento contra los Chicago Bulls, buscando el pase a la siguiente ronda.
Con récord final de 37-45 en la Conferencia Este, Miami ocupa el décimo puesto, lo que lo obliga a superar una dura ruta si desea llegar a los playoffs. En caso de vencer a Chicago, el siguiente desafío será enfrentar al perdedor del duelo entre Orlando Magic y Atlanta Hawks para quedarse con el último boleto disponible.
Más allá del resultado, la noche fue de Jaime Jáquez. Su actuación reafirma que el talento mexicano tiene un lugar sólido en la mejor liga del mundo. Con fuerza ofensiva, visión de juego y actitud decidida, se posiciona como una pieza clave para el futuro inmediato del Heat y como una inspiración para nuevas generaciones de atletas en México. Su nombre ya resuena con más fuerza que nunca. Y esta vez, con 41 razones para recordarlo.