El piloto de Fórmula 1, Yuki Tsunoda, enfrentó dificultades al ingresar a Estados Unidos antes del Gran Premio de Las Vegas, luego de ser retenido durante varias horas por autoridades migratorias. Según relató el propio corredor, fue aislado en una habitación y sometido a una tensa discusión con un agente, quien casi lo deporta a Japón.
“Me sentí extraño cuando me detuvieron. Por suerte, el proceso no duró más de dos o tres horas, aunque hubo varias discusiones”, comentó Tsunoda. Durante su retención, el piloto no tuvo acceso a comunicarse con su equipo ni con nadie más.
Aunque contaba con toda la documentación necesaria, Tsunoda no comprende por qué la situación fue tan complicada. Sospecha que su vestimenta pudo influir en la percepción de las autoridades, ya que portaba pijama en ese momento. “Tal vez no parecía un piloto de F1, pero creo que el agente lo sabía. Incluso me preguntó sobre mi salario durante la conversación”, añadió.
Afortunadamente, el incidente no pasó a mayores, y Tsunoda logró ingresar al país para participar sin inconvenientes en la carrera del fin de semana con su equipo, Red Bull.