En plena pretemporada y tras conquistar el Super Bowl LIX, Saquon Barkley, corredor estrella de los Philadelphia Eagles, aclaró que rechazó formar parte del nuevo Consejo de Deportes, Aptitud Física y Nutrición impulsado por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
El pasado 31 de julio, la Casa Blanca oficializó la creación de este consejo mediante una orden ejecutiva con el fin de impulsar acciones en programas escolares que fomenten la actividad física y el deporte juvenil. Entre los nombres que figuraban como miembros del consejo destacaban varios atletas reconocidos, incluido Barkley.
Sin embargo, al finalizar una sesión de entrenamiento del equipo campeón, el propio jugador dejó en claro que nunca aceptó formar parte del organismo y que, de hecho, apenas estaba conociendo los detalles.
“Hace un par de meses mi equipo se enteró de este consejo, así que no estoy muy familiarizado con él. Pensé que iba a estar muy ocupado, así que mi familia y yo pensamos que probablemente lo mejor sería no aceptarlo”, explicó Barkley ante los medios.
El actual Jugador Ofensivo del Año 2024 también señaló que le tomó por sorpresa verse mencionado oficialmente como integrante del consejo federal, lo cual generó confusión entre los aficionados y medios de comunicación.
“La verdad es que me sorprendí un poco cuando mencionaron mi nombre. De todas maneras supongo que es algo grandioso. Así que lo agradezco”, puntualizó el corredor, quien suma tres selecciones al Pro Bowl y una mención All-Pro.
Otros deportistas mencionados en el mismo comité fueron Nick Bosa (San Francisco 49ers), Tua Tagovailoa (Miami Dolphins) y Harrison Butker (Kansas City Chiefs), entre figuras de diferentes disciplinas.
Esta no ha sido la única interacción de Barkley con el presidente. Antes de la visita de los Eagles a la Casa Blanca el pasado 28 de abril, donde fueron homenajeados por su título en la NFL, Barkley jugó al golf con Trump en el National Golf Club Bedminster, en Nueva Jersey, y posteriormente volaron juntos a Washington D.C.
Ese episodio generó críticas en redes sociales, a las que el jugador respondió en su momento defendiendo su postura neutral:
“Quizás sólo respeto el cargo, no es un concepto difícil de entender. Jugué al golf con Obama hace poco, y tengo ganas de terminar mi ronda con Trump. Ahora, dejen fuera menciones con toda esta política”, publicó entonces. Con este deslinde, Barkley reafirma su enfoque en el terreno de juego, dejando de lado cualquier implicación en temas políticos o administrativos.