La FIFA confirmó que todos los aficionados serán bienvenidos a Estados Unidos para el Mundial de Clubes 2025, que se celebrará del 14 de junio al 13 de julio en ocho ciudades del país. El anuncio fue realizado por el presidente del organismo, Gianni Infantino, durante el 75° Congreso Ordinario de la FIFA celebrado en Asunción, Paraguay.
“El mundo será bienvenido en Estados Unidos”, declaró Infantino. Con esta afirmación, el máximo dirigente del fútbol internacional buscó calmar las preocupaciones generadas por las nuevas políticas migratorias impulsadas por el gobierno de Donald Trump, que amenazaban con limitar la entrada de seguidores extranjeros al país.
Infantino señaló que el mensaje no proviene únicamente de la FIFA, sino directamente del gobierno estadounidense. Recalcó que tanto los jugadores, como los aficionados y todas las personas involucradas en el evento, podrán ingresar sin impedimentos para disfrutar de la fiesta del fútbol. “Todos serán bienvenidos. Aquellos que quieran ir y celebrar el futbol, los que quieran ir a pasarla bien, los que quieran ir y celebrar la Copa del Mundo con sus familias y amigos y pasar allí un momento emotivo”, expresó durante su intervención.
El torneo reunirá a 32 equipos de cinco continentes en una edición sin precedentes. Se trata de una ambiciosa expansión que ha generado polémica en el ámbito deportivo, especialmente entre los clubes europeos, que han manifestado su oposición por considerar que el certamen extiende innecesariamente el calendario de competencias de sus futbolistas.
A pesar de las críticas, la expectativa por el torneo ha crecido significativamente, en especial entre los seguidores de clubes sudamericanos y mexicanos. Sin embargo, las recientes medidas restrictivas contra la migración ilegal impuestas por la administración de Trump habían sembrado dudas respecto a la posibilidad de que hinchas provenientes de países con requisitos de visa, como Argentina, pudieran asistir al campeonato.
En ese contexto, Infantino mantuvo reuniones de alto nivel con autoridades de la Casa Blanca la semana pasada, y también sostuvo un encuentro con el presidente Trump durante una gira conjunta por Oriente Medio. El resultado de esos encuentros fue la garantía oficial de que los aficionados internacionales tendrán acceso para presenciar el evento.
Durante su discurso, Infantino también hizo referencia indirecta al compromiso del fútbol con la seguridad en los estadios. “En general, en el futbol no queremos a las personas que causan problemas, queremos que permanezcan fuera del futbol”, afirmó, aludiendo a los grupos violentos.
Como parte de las medidas de prevención, el gobierno argentino ya entregó a autoridades estadounidenses una lista con 15 mil aficionados de River Plate y Boca Juniors que tienen prohibido el ingreso a los estadios en su país por antecedentes de violencia. Esta colaboración refuerza el esfuerzo por garantizar un torneo pacífico y familiar.