El Neom SC, club de Arabia Saudita recién ascendido a la Saudi Pro League, fue señalado en una investigación del diario francés L’Équipe por contratar a falsos aficionados con el objetivo de animar en las gradas de sus partidos como local.
El reporte asegura que el club organiza a estas personas a través de grupos de WhatsApp y les paga 11 dólares por asistir al estadio Ciudad Deportiva Rey Khalid. La instrucción principal, según la investigación, es generar ruido y ambiente en partidos donde las tribunas lucen vacías.
El caso más reciente ocurrió el 18 de septiembre, cuando el Neom SC recibió al Al-Okhdood en un duelo que terminó 1-0. De acuerdo con la publicación, alrededor de 300 personas, en su mayoría originarias de África, fueron llevadas al recinto para animar desde las gradas, que de otra forma hubieran permanecido casi desiertas.
La historia del club refleja una trayectoria marcada por ascensos y descensos. Fundado en 1965 bajo el nombre de Al-Suqoor Club, el equipo militó durante décadas en divisiones inferiores. En 2011 logró por primera vez llegar a la máxima categoría, aunque poco después descendió hasta la tercera división. Fue entonces cuando la empresa NEOM adquirió la institución, iniciando un proceso de transformación.
En 2023, el Ministerio de Deportes de Arabia Saudita tomó el control del equipo y lo rebautizó como Neom Sports Club, vinculado directamente al megaproyecto futurista de la compañía NEOM. Este plan contempla el desarrollo de una ciudad lineal de 170 kilómetros de longitud en medio del desierto, con infraestructura deportiva que aspira a ser parte del Mundial de 2034, cuya sede fue otorgada al país árabe.
Entre los proyectos más llamativos se encuentra el NEOM Stadium, considerado uno de los futuros recintos más exóticos del mundo. Según lo previsto, tendrá capacidad para 45 mil espectadores y se construirá a 350 metros de altura, con accesos limitados únicamente a transporte público o por vía marítima.
El reciente ascenso del Neom SC vino acompañado de fichajes provenientes, en su mayoría, de la Ligue 1 francesa, lo que marcó un giro en su estrategia deportiva. Sin embargo, las acusaciones sobre el uso de “aficionados contratados” han generado atención internacional, sumándose a las críticas hacia la forma en que Arabia Saudita impulsa el desarrollo de su liga y la proyección de sus clubes.
La investigación de L’Équipe coloca en el centro del debate a un equipo que combina ambiciones deportivas con proyectos urbanísticos futuristas, pero que enfrenta cuestionamientos por prácticas fuera de lo común en el mundo del futbol profesional.