El Estadio Jalisco vibró como pocas veces en una noche cargada de intensidad, nostalgia y gloria. Los Leones Negros de la Universidad de Guadalajara conquistaron el título del Clausura 2025 de la Liga de Expansión MX en una final cardiaca que se resolvió desde los once pasos. La victoria 5-4 en penaltis ante la Jaiba Brava de Tampico Madero coronó una campaña intensa, aunque sin la recompensa del ascenso a la Liga MX.
El tiempo regular fue una batalla estratégica y física, con ambos equipos buscando imponer su estilo. Durante los primeros 90 minutos, Felipe López y Gerardo ‘Kampa’ Ruiz se convirtieron en figuras, evitando cualquier daño en sus respectivos arcos. El gol parecía negado, hasta que el tiempo agregado cambió el rumbo de la historia.
Cuando el cronómetro marcaba el minuto 90+4, Arturo ‘Zully’ Ledesma se alzó con determinación para conectar un cabezazo certero que mandó el balón al fondo de las redes. El rugido de los aficionados universitarios rompió el silencio en la Calzada Independencia. Con ese tanto, el marcador global quedó 1-1, lo que llevó el encuentro al alargue.
Los tiempos extra fueron una montaña rusa de emociones. Denilson Muñoz sacó un disparo potente que obligó a Ruiz a vestirse de héroe momentáneo. Del otro lado, Alonso Escoboza tuvo en sus pies la gloria para Jaiba Brava, pero su toque sutil pasó rozando el poste. El título pendía de un hilo.
El drama llegó a su punto máximo en la serie de penaltis. El quinto disparo de la Jaiba Brava recayó en su arquero, Gerardo ‘Kampa’ Ruiz, quien falló y dejó la puerta abierta para la definición. Jonathan Sánchez, con temple y precisión, ejecutó el tiro definitivo que aseguró el campeonato para los Leones Negros.
A pesar del título, el equipo tapatío, al igual que el Atlante, no podrá ascender a la Liga MX. Esto se debe al actual sistema de competencia, que impide la promoción deportiva directa, sin importar la certificación cumplida por los clubes. El campeonato, aunque brillante, deja un sabor agridulce.
La UdeG suma así otro capítulo dorado a su historia en el futbol mexicano, alimentando la esperanza de una futura restructuración que les permita volver al máximo circuito. Mientras tanto, su afición celebra con orgullo un título merecido, conseguido con garra, talento y un final de película.