El francés Ousmane Dembélé se llevó este lunes el Balón de Oro, superando en las votaciones al juvenil del Barcelona Lamine Yamal, considerado por muchos como el gran favorito. La elección tuvo como peso decisivo la temporada de ensueño del atacante con el Paris Saint-Germain, donde consiguió el triplete nacional y la Champions League.
A sus 28 años, Dembélé firmó una campaña sobresaliente al marcar 35 goles en 53 partidos, además de aportar 16 asistencias en todas las competiciones. Bajo la dirección de Luis Enrique, el delantero se consolidó como pieza clave del PSG, que conquistó la Ligue 1, la Copa de Francia y su primer título europeo desde la era de Mbappé.
El conjunto parisino también llegó a la final del Mundial de Clubes en Estados Unidos, aunque perdió frente al Chelsea. Pese a que actualmente se encuentra lesionado y no estuvo convocado para el duelo liguero contra el Marsella, Dembélé recibió el galardón en el Théâtre du Châtelet de París.
El Balón de Oro, organizado por la revista France Football, distingue al mejor jugador de la temporada considerando rendimiento individual, títulos colectivos, calidad técnica y juego limpio. La votación está a cargo de periodistas internacionales especializados en futbol. Con este reconocimiento, Dembélé sucede al español Rodri del Manchester City, ganador de la edición anterior.
El camino del delantero francés ha sido marcado por altibajos. Su talento emergió en el Rennes y brilló en el Borussia Dortmund, lo que llevó al Barcelona a pagar más de 100 millones de euros en 2017 por su fichaje. Sin embargo, las constantes lesiones y la irregularidad le impidieron consolidarse como referente en el club catalán, donde pasó seis temporadas antes de su traspaso al PSG en 2023 por 50 millones de euros.
En París, su carrera tomó un rumbo distinto. Con confianza plena de su entrenador, Dembélé se convirtió en un atacante decisivo, con regularidad y determinación en los momentos clave de la temporada.
El principal rival en las votaciones fue Lamine Yamal, la joven sensación blaugrana, quien con apenas 18 años brilló en la campaña del Barcelona. El extremo fue determinante para la conquista de LaLiga, la Copa del Rey y la Supercopa de España, registrando 18 goles y 25 asistencias en 55 partidos. Pese a la expectativa generada en torno a su candidatura, quedó en segundo lugar detrás del francés.
Con este logro, Dembélé alcanza el punto más alto de su carrera, consolidándose como uno de los mejores futbolistas del mundo y sumando su nombre a la lista de figuras que han ganado el máximo reconocimiento individual del futbol.