El año 2024 ha comenzado con la triste noticia del fallecimiento de Mario ‘Lobo’ Zagallo, una figura inmortal del fútbol brasileño. Su partida deja un vacío imposible de llenar en la historia del deporte rey.
El viernes 5 de enero de 2024, el mundo del fútbol se conmovió al conocer la pérdida de Zagallo a la edad de 93 años, una verdadera leyenda que conquistó cuatro Copas del Mundo, un logro único e inigualable. Su legado no sólo se basa en estadísticas, sino en la pasión y dedicación que imprimió en cada etapa de su carrera.
Las redes sociales, junto con la Confederación Brasileña de Futbol (CBF), se convirtieron en el escenario para rendir homenaje a este ícono del balompié. En la cuenta oficial de ‘Lobo’ Zagallo se compartió un emotivo mensaje: «Con enorme pesar, informamos el fallecimiento de nuestro eterno tetracampeón mundial Mário Jorge ‘Lobo’ Zagallo. Un padre dedicado, abuelo amoroso, amigo fiel, profesional victorioso y un gran ser humano. Ídolo grande. Un patriota que nos deja un legado de grandes conquistas.»
La CBF también expresó su pesar: «La CBF y el fútbol brasileño lamentan la muerte de una de sus mayores leyendas, Mário Zagallo. La CBF presta solidaridad a sus familiares y fans en este momento de pesar por la partida de un ídolo de nuestro fútbol.»
Zagallo dejó su huella en diferentes roles, como futbolista en 1958 y 1962, director técnico en 1970, y asistente técnico en 1994. No solo fue parte de victorias, sino que también experimentó el amargo sabor de la derrota, alcanzando un Subcampeonato Mundial en Francia 1998.
Su historial de éxitos abarca títulos diversos, desde la Copa del Mundo con Brasil hasta la Copa Asiática con Arabia Saudita, pasando por la Serie A Brasileirao con Botafogo y el Campeonato Carioca con Flamengo y Fluminense. Zagallo se convirtió en una encarnación de la gloria futbolística.
Brasil se despide de un ícono que marcó una época del balompié. Mário Jorge Lobo Zagallo falleció en Río de Janeiro después de haber estado hospitalizado desde el 26 de diciembre. Conocido como el «Viejo Lobo» por su aguerrido juego como extremo izquierdo, Zagallo se convirtió en un ídolo para generaciones, un referente mundial y uno de los personajes más destacados en la historia del fútbol brasileño. Su legado va más allá de los títulos.
Nacido el 9 de agosto de 1931 en Atalaia, Alagoas, Zagallo era un patriota devoto que creía en la suerte del número 13 y veneraba a san Antonio. Su muerte llega un año después del adiós a otra leyenda, O Rei Pelé. Ambos compartieron la gloria en Suecia y Chile, con Zagallo dirigiendo a Pelé en el Mundial de México.
El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, rindió homenaje: «Valiente, dedicado, apasionado y supersticioso, Zagallo fue un ejemplo de brasileño que nunca se rinde. Es esta lección y espíritu de cariño, amor, entrega y superación la que deja para nuestro país y el fútbol mundial.»
Zagallo también coordinó el triunfo de Brasil en Estados Unidos 1994. Una gesta que pone su nombre en lo más alto del fútbol mundial. Acompañado por Carlos Alberto Parreira, su compañero en México 1970, lideró nuevamente a la Canarinha en Alemania 2006.
Con el adiós de Zagallo, una página dorada del fútbol brasileño se cierra. Su legado trasciende estadísticas y títulos, dejando un impacto imborrable en el corazón de los fanáticos y la memoria del deporte rey. La generación dorada del fútbol brasileño ve partir a otro de sus grandes referentes, pero la leyenda de ‘Lobo’ Zagallo vivirá eternamente en la historia del balompié.