La República Dominicana se proclamó campeona de la Serie del Caribe Mexicali 2025 tras una reñida final contra México. En un duelo dominado por el pitcheo, los Leones del Escogido vencieron 1-0 a los Charros de Jalisco, arrebatándoles el invicto y el título en su propio territorio.
El gran protagonista de la noche fue el abridor Esmil Rogers, quien con el apoyo de su bullpen logró silenciar la ofensiva mexicana y asegurar la victoria para su equipo. Durante seis entradas impecables, Rogers permitió solo un hit, otorgó cinco bases por bolas y ponchó a cuatro rivales sin admitir carrera. Su relevo, encabezado por Joe Corbett, Ulises Joaquín y Jimmy Cordero, mantuvo a raya a los Charros hasta el final del juego.
La única carrera del encuentro llegó en la tercera entrada, cuando Robinson Canó conectó un rodado con las bases llenas, lo que permitió a Junior Lake anotar. Pese a los intentos de reacción de México, su ofensiva no logró descifrar el pitcheo dominicano. Reynaldo Rodríguez conectó el primer hit para México en la cuarta entrada, pero los Charros desaprovecharon varias oportunidades con corredores en base.
El estratega mexicano Benjamín Gil optó por retirar a Manny Bañuelos en la quinta entrada y dar paso al bullpen, con David Gutiérrez, Jesús Cruz y Stephen Nogosek haciendo un trabajo sólido. Sin embargo, el daño ya estaba hecho y la ofensiva mexicana no encontró la manera de responder.
La novena entrada fue clave en la emoción del partido. Jimmy Cordero subió a la lomita para cerrar el juego por Dominicana y tras ponchar a Mateo Gil, golpeó a Jack Mayfield, dándole a México una última esperanza. Un rodado para doble matanza de Julián Ornelas pareció sentenciar el partido, pero tras revisión se determinó que Yamaico Navarro se despegó de la base, otorgándole a México una nueva oportunidad. Sin embargo, Cordero selló el triunfo con un ponche sobre Reynaldo Rodríguez, desatando la celebración dominicana en el estadio.
Con este triunfo, los Leones del Escogido suman su quinto campeonato en la Serie del Caribe y le otorgan a la República Dominicana su título número 23 en la historia del torneo, reafirmando su dominio en la competencia. Para Albert Pujols, quien debutó como manager profesional, esta victoria marca un inicio triunfal en su nueva faceta.