En el panorama deportivo de México, una realidad emergente se ha consolidado: el ejército se ha convertido en el salvavidas económico para numerosos atletas que enfrentan la falta de apoyo de la Comisión Nacional del Deporte (Conade). La historia de Gaby Agúndez, Kevin Berlín y otros clavadistas es un reflejo claro de esta situación, donde la falta de respaldo institucional ha obligado a estos talentos a recurrir a las filas castrenses para seguir persiguiendo sus sueños olímpicos.
De los más de 100 deportistas que México llevará a los Juegos Olímpicos de París 2024, casi la mitad proviene de las filas del ejército. Este fenómeno no es casualidad, sino una respuesta a la creciente necesidad de encontrar un respiro económico ante el retiro de becas y apoyo por parte de la Conade. Kevin Berlín Reyes, medallista de bronce en el Mundial de Fukuoka en los 10 metros sincronizado, es uno de los deportistas que mejor ilustra esta situación.
En el inicio de 2023, Berlín Reyes enfrentó una crisis cuando la Conade, dirigida por Ana Guevara, le retiró una beca crucial para su participación en los Juegos Olímpicos. Con 23 años y una carrera de 16 años en los clavados, se encontró en una encrucijada: continuar con su pasión o abandonar el deporte. En un intento desesperado por obtener ingresos, inició un emprendimiento familiar de venta de café a distancia, denominado ‘Olimpiada Café’, en su natal Veracruz.
Simultáneamente, Berlín Reyes comenzó una batalla legal para que la Conade le restituyera la beca, la cual ganó recientemente. Sin embargo, la incertidumbre económica persistía hasta que recibió una noticia inesperada: la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) aprobó su ingreso a las filas castrenses, asegurándole un salario mensual y beneficios sociales para él y su familia. Esta estabilidad le permitió enfocarse plenamente en su preparación para París 2024.
“Obviamente me da esa tranquilidad y no estar pensando cómo le voy hacer para pagar la renta”, expresó Berlín Reyes desde el Comité Olímpico Mexicano, tras una sesión de entrenamiento. Esta situación no es exclusiva de Berlín. Clavadistas como Alejandra Orozco y Gabriela Agúndez también encontraron en el ejército un respiro ante la falta de apoyo de la Conade. Orozco, medallista de plata en Londres 2012 y bronce en Tokio 2021, y Agúndez, medallista de bronce en Tokio, se unieron al ejército entre 2019 y 2021 para garantizar su sustento.
“Nos han apoyado mucho y ha sido parte de todos nuestros logros. Fueron parte de nuestra gran medalla de Tokio”, afirmó Orozco, quien ahora tiene el rango de sargento segundo y será la abanderada de México en París. La teniente coronel Leticia Yáñez Domínguez, jefa de la sección de alto rendimiento de la Sedena, explicó que los deportistas deben cumplir con un curso de adiestramiento básico de ocho semanas, pero reciben todas las facilidades para entrenar a tiempo completo.
Actualmente, el ejército cuenta con 104 deportistas en 24 disciplinas y la Armada con 51 atletas en 12 disciplinas. De estos grupos, 36 y 7 atletas, respectivamente, se clasificaron para París 2024. La participación militar en las delegaciones olímpicas mexicanas ha crecido notablemente en la última década, coincidiendo con la gestión del presidente Andrés Manuel López Obrador, quien ha incrementado el poderío de las fuerzas armadas en diversas áreas.
El exclavadista Fernando Platas, miembro del Comité Olímpico Mexicano, afirmó que las fuerzas armadas han brindado “tranquilidad” y “seguridad” a los deportistas, lo cual se ha reflejado en los resultados deportivos de México en competiciones internacionales. La historia de Kevin Berlín y sus compañeros es un testimonio de cómo, a pesar de los obstáculos, la determinación y el apoyo adecuado pueden llevar a los deportistas a alcanzar sus metas.
Mientras Berlín Reyes sueña con un podio en París, la seguridad económica que le ofrece el ejército le permite concentrarse plenamente en su preparación. “Viendo qué pasa, decido si sigo más años o vemos algo más del emprendimiento”, concluyó. Esta historia de resiliencia y adaptación resalta la importancia del apoyo integral para los atletas y el papel crucial que el ejército ha jugado en sus vidas.