A un mes del inicio de los Juegos Olímpicos de París 2024, la delegación mexicana se compone de 94 atletas, cifra que refleja una realidad más moderada respecto a las expectativas iniciales del Comité Olímpico Mexicano (COM). María José Alcalá, presidenta del organismo, reconoció la necesidad de una estrategia más efectiva de cara a los Juegos de Los Ángeles 2028.
«Traíamos expectativas más altas, pero cada vez será más difícil llegar a unos Juegos Olímpicos sin una planificación adecuada, evaluación y seguimiento de cada federación. Será crucial unir esfuerzos con todos los institutos del deporte y Conade», mencionó Alcalá.
La dirigente destacó la importancia de una planificación post París 2024 para aumentar la representación mexicana en futuras olimpiadas. «Terminaremos este ciclo para iniciar uno nuevo, donde implementaremos estrategias para tener una delegación más amplia y competitiva en 2028», afirmó la exclavadista.
Para alcanzar este objetivo, Alcalá enfatizó la necesidad de «una estrategia clara sobre los eventos clasificatorios, sistemas de clasificación más eficientes y una gestión precisa del presupuesto disponible».
En relación a los atletas clasificados, el nadador Jorge Iga se convirtió recientemente en el último deportista en asegurar su boleto. Alcalá expresó su confianza en que la delegación mexicana pueda alcanzar entre 103 y 104 atletas clasificados, incluyendo una plaza en natación bajo criterios de universalidad establecidos por Word Aquatics.
«La plaza tiene ciertas reglas que nos impone Word Aquatics, como la edad máxima de 30 años, participación en eventos específicos y tiempos mínimos», explicó Alcalá.
Además, anticipó que entre las posibles nadadoras para esta plaza se encuentran nombres como Celia Pulido, Miranda Grana, Athena Meneses y Sofía Revilak, cuya selección se revelará en los próximos días.
«Es fundamental asegurarnos de analizar meticulosamente cada punto para hacer justicia en la selección», concluyó María José Alcalá.