Luego de la decepcionante derrota en el Super Bowl LVIII ante los Chiefs de Kansas City, los 49ers de San Francisco han tomado decisiones importantes en su estructura organizativa. Una de ellas, anunciada el miércoles, es el despido del coordinador defensivo Steve Wilks.
Este movimiento, aunque sorprendente para algunos, llega como una respuesta a la presión generada por la amarga pérdida en tiempo extra, a pesar de la destacada actuación defensiva del equipo durante gran parte del juego.
Tras una emocionante batalla en el Super Bowl, los 49ers se enfrentaron a la cruda realidad de su derrota. A pesar de su sólida defensa, sucumbieron ante los Chiefs en tiempo extra, concluyendo así su temporada con un sabor agridulce.
La pérdida no solo dejó a los aficionados desconcertados, sino que también desencadenó una serie de decisiones dentro de la organización del equipo, siendo una de las más destacadas el despido de Wilks como coordinador defensivo. Esta noticia sorprende, especialmente después de las expresiones de Kyle Shanahan, entrenador en jefe de los 49ers, quien manifestó su deseo de mantener al personal técnico intacto.
Según informes de Ian Rapoport de NFL Network, Shanahan tomó la decisión de relevar a Wilks de sus funciones, poniendo fin a su tiempo en San Francisco.
A lo largo de la temporada, la defensa de los 49ers demostró ser una fuerza formidable en el campo, permitiendo solo 17.5 puntos por partido, lo que los ubicó en el tercer lugar de la liga en esta métrica. Sin embargo, en los tres juegos de postemporada, esa cifra aumentó a 25.7 puntos, un factor que podría haber contribuido a la decisión de prescindir de Wilks.