La National Football League (NFL) continúa con sus movimientos incluso después del Super Bowl LVIII, y esta vez ha anunciado la primera suspensión para la próxima temporada: el mariscal de campo de Las Vegas Raiders, Jimmy Garoppolo, ha sido sancionado por violar la política de sustancias que mejoran el rendimiento.
Garoppolo, quien firmó un contrato millonario de más de 72 millones de dólares con los Raiders esta temporada, utilizó medicamentos recetados sin autorización de la NFL o la Asociación de Jugadores de la NFL (NFLP), lo que le ha valido una suspensión de dos juegos para la próxima campaña.
Esta sanción, independientemente del equipo en el que se encuentre, será aplicada al jugador. Se espera que los Raiders corten a Garoppolo en marzo, después de que perdiera la titularidad a mitad de la temporada.
Además de la suspensión impuesta por la NFL, esta violación tiene importantes implicaciones financieras para Garoppolo.
Los Raiders ya no están obligados a pagar una parte de su salario, lo que les ahorraría cerca de 11.4 millones de dólares que el mariscal de campo tenía garantizados antes de que la liga detectara su violación de la política antidopaje.