Corea del Norte se consagró campeona del Mundial Femenil Sub-20 por tercera vez, tras derrotar 1-0 a Japón en una intensa final disputada en Bogotá, Colombia. Con este triunfo, las coreanas igualan a las potencias de Estados Unidos y Alemania como las máximas ganadoras de la categoría, habiendo alzado el trofeo previamente en 2006 y 2016.
El único gol del encuentro llegó temprano, al minuto 15, cuando Choe Il Son disparó desde fuera del área y su tiro fue desviado por la defensora japonesa Uno Shiragaki, lo que dejó sin oportunidad a la arquera Akane Okuma. Con esta anotación, Choe sumó su sexto gol del torneo, llevándose la Bota de Oro como la máxima goleadora.
Ri Song Ho, el estratega norcoreano, logró que su equipo mantuviera un rendimiento impecable durante todo el torneo, culminando con un registro perfecto de siete victorias, 25 goles a favor y solo cuatro en contra. Corea del Norte no solo brilló en ataque, sino que también mostró una defensa impenetrable, encabezada por Oh Sol Song y Kim Kang Mi, quienes controlaron cada intento japonés.
“El equipo mostró una gran disciplina táctica y supo mantener el orden en todo momento”, destacó Ri Song Ho tras el partido, resaltando la importancia del esfuerzo colectivo que permitió neutralizar a Japón, una selección que llegaba con la mejor defensa del torneo y 18 goles a favor antes de la final.
Japón, que jugaba su tercera final consecutiva, buscaba revancha tras haber sido derrotado por Corea del Norte en la final de la Copa Asiática Sub-20 en marzo, pero no pudo superar el sólido planteamiento norcoreano. Pese a sus intentos, las japonesas apenas inquietaron la portería rival, y los pocos remates de Manaka Matsukubo no fueron suficientes.
Con este título, Corea del Norte demuestra una vez más su dominio en el fútbol juvenil femenino, consolidándose entre las grandes potencias de la categoría. Por su parte, Japón tendrá que seguir luchando para añadir más estrellas a su palmarés, luego de ganar su primer Mundial en 2018. En el partido por el tercer lugar, Estados Unidos superó a los Países Bajos 2-1 en tiempo extra, completando el podio del torneo.