El mundo de la lucha libre mexicana está de luto tras la trágica noticia del fallecimiento de Pequeño Nitro a los 40 años. Esta pérdida ha dejado una profunda tristeza entre sus seguidores y compañeros del ring, quienes han llenado las redes sociales con emotivos mensajes en su memoria.
Pequeño Nitro, cuyo verdadero nombre era Jesús Andrade Salas, fue una figura destacada en la lucha libre miniatura y especialmente reconocido en el Consejo Mundial de Lucha Libre (CMLL). Su inesperada partida ha conmocionado a la comunidad luchística, que aún no se repone del impacto.
La noticia fue divulgada el pasado domingo 19 de mayo, cuando Demus, cuñado de Pequeño Nitro y también luchador, informó al público a través de Facebook con un mensaje lleno de dolor y resignación. Demus expresó: «Nunca sabe uno cuál será el final de la historia. Y creo que cada quien vive como quiere ahora. Sé que estás bien, cuñado. Descansa en paz Pequeño Nitro I. En paz descanse. Que haya paz y pronta resignación a mi familia, mi hermana y sobrinos.»
Esta declaración refleja el sentimiento de pérdida y la búsqueda de consuelo ante una tragedia que ha sacudido a sus seres queridos y a sus seguidores.
Aunque al principio no se dieron a conocer los detalles del fallecimiento, una fuente cercana reveló que Pequeño Nitro murió debido a complicaciones derivadas del alcoholismo. Este problema de salud se había agravado por un cuadro depresivo que lo aquejaba desde hacía tiempo. Según información del diario deportivo ‘Récord’, el luchador estaba sumido en una profunda depresión tras una lesión en la rodilla sufrida en 2023, la cual lo obligó a alejarse de los cuadriláteros y lo dejó incapacitado para luchar.
Este golpe en su carrera profesional tuvo un impacto devastador en su vida personal. Pequeño Nitro se alejó de su familia y amigos, cayendo en una espiral de alcoholismo que lo llevó a vivir en las calles de Toluca, Estado de México. Su cuerpo fue encontrado el 3 de mayo, pero no fue identificado hasta el 14 de mayo.
A lo largo de su carrera, Pequeño Nitro dejó una marca imborrable en la lucha libre mexicana. Su habilidad y carisma lo convirtieron en un favorito de los aficionados, quienes ahora lloran su partida. Su muerte no solo es una pérdida para la lucha libre, sino también un recordatorio de los desafíos que enfrentan muchos luchadores más allá del ring.
La depresión y el alcoholismo son problemas serios que afectan a muchas personas, incluidas aquellas que dedicaron sus vidas a entretener y emocionar al público. El fallecimiento de Pequeño Nitro pone de manifiesto la necesidad de apoyar a aquellos que enfrentan batallas internas, incluso cuando parecen estar en la cima de su carrera.
Desde la noticia de su muerte, las redes sociales se han llenado de mensajes de condolencia de parte de colegas, fanáticos y amigos. Todos recuerdan a Pequeño Nitro no solo por sus logros en el ring, sino por su carácter y su pasión por la lucha libre.
En este momento de dolor, la comunidad de lucha libre mexicana se une para rendir homenaje a un luchador que, a pesar de las adversidades, dejó una huella imborrable. Que su legado inspire a otros a buscar ayuda y apoyo en tiempos difíciles, y que su memoria permanezca viva en el corazón de aquellos que lo admiraron y lo amaron.